Realmente soy un poco escéptico con respecto a las guitarras de 7 cuerdas, o a los bajos de 5 o 6, o a los violines de 5, etc.. En parte porque cambian la esencia propia de cada instrumento, pero sobre todo porque no son utilizados de una manera correcta.
Pero también no soy completamente cerrado en su uso. Hay géneros musicales que van muy bien con el uso de estos instrumentos. Y también son excelente para ampliar nuestra “zona de trabajo” en la cual podemos componer e improvisar.
Por ejemplo podemos escuchar al guitarrista Chris Broderick que utiliza una guitarra de 7 cuerdas con la técnica de tapping a dos manos.
Con la afinación estándar de la guitarra de 7 cuerdas (Si, Mi, La, Re, Sol, Si, Mi) solamente obtienes 5 notas extras que en la guitarra estándar. Claro esas notas extras nos pueden dar “matices” distintos. Y también nos sirven para cambiar los bajos en ciertos acordes, como por ejemplo la técnica de jazz “walking pass”.
Así que en resumen la guitarra de 7 cuerdas si es un instrumento interesante, pero nunca lo recomendaría para un guitarrista principiante o intermedio, ya que no lo aprovecharían a su máximo. Y la diferencia de precios es mucha.
Pero si eres uno de esos afortunados con una guitarra de 7 cuerdas pronto compartiremos algunos ejercicios para usar su potencial al máximo.
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